Como ya se había mencionado, la combinación de un trastorno alimenticio con diabetes causa riesgos doblemente severos en el paciente. Lisa, a la edad de 14 años se le diagnosticó diabetes tipo 1. Poco después también se descubrió que padecía anorexia. A la edad de 27 años, Lisa omitió sus dosis de insulina y comenzó a desarrollar problemas graves como daño renal y enfermedad ocular grave. Tiempo después, murió. Otras consecuencias de la diabulimia son infecciones constantes, deshidratación, caída del cabello, retinopatía, ceguera, pie diabético, neuropatías, problemas gástricos, de la piel, crecimiento y desarrollo lento, atrofia muscular y posibilidades de caer en coma. Asimismo, el riesgo de mortalidad se triplica y se reduce la esperanza, siendo la edad media de muerte a los 45 años. Fuentes: Autor:Ale Núñez. LCC |
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