Cada niño con autismo es diferente uno de otro, sin embargo se han establecido algunos comportamientos muy similares, tales como: - Lenguaje poco o nulo, o bien pierde el habla.
- Ecolalia, repite lo mismo o lo que oye (frases o palabras).
- Actua como si fuera sordo, pero no soporta ciertos sonidos o luces muy fuertes como por ejemplo, la licuadora o el microondas.
- No mira directamente a los ojos.
- Se obsesiona con los objetos sin razón alguna.
- No muestra ningun interés por los juguetes y/ o no los usa adecuadamente.
- Tiende a reunir objetos o los pone en línea.
- Muestra total desinterés por su entorno y en las relaciones sociales con los demás.
- No responde a su nombre.
- No obedece ni sigue instrucciones.
- Cuando quiere algo, no lo pide, toma la mano de alguien dirigiéndola a lo que desea.
- Rechaza el contacto físico. No le gusta que lo toquen o carguen.
- Aleteo de manos (como si intentara volar) en forma rítmica y constante.
- Gira o se mece sobre sí mismo.
- Se queda quieto observando un punto como si estuviera hipnotizado.
- Camina de puntitas (como ballet).
- Puede ser un niño hiperactivo (muy inquieto) o pasivo (demasiado quieto).
- Muestra agresividad y/o puede ser en ocasiones auto agresivo (se golpea a sí mismo).
- Tiene una gran obsesión por el orden y la rutina, rechaza los cambios.
- Se enoja mucho y hace rabietas sin razón aparente o porque no obtuvo algo.
- Sonríe sin razón aparente (como si viera fantasmas).
- En ocasiones, estos niños, además de ser autistas, tienen algún otro trastorno del desarrollo (retraso mental, motriz, Síndrome de Down, etc.)
- Sólo un pequeño segmento de niños con autismo, llega a mostrar alto grado de inteligencia; su falta de aprendizaje se hace evidente, debido precisamente a su
pobre o nula comunicación.
Esta lista es solo una referencia, para un diagnóstico certero, es necesaria la asesoría de un neurólogo así como la valoración del psicólogo. |