¿Son inventadas o descubiertas las ideas matemáticas? Para atender correctamente las necesidades de los niños que presentan capacidades extraordinarias, se les debe de nutrir en la parte teórica, intelectual y creativa, y además se les debe alentar a que tomen riesgos y a que su curiosidad crezca. Albert Einstein decía que uno de los más grandes problemas del hombre radica en la claridad de sus significados pero en la confusión de sus resultados. Siempre es sabido que cuando existen habilidades extraordinarias, deben existir para lo mismo, estímulos extraordinarios. Debemos estar conscientes y asegurarnos de que los niños experimenten el rigor, la coherencia y la complejidad en lo que están aprendiendo; pero debemos promover a que se den acercamientos colaborativos y dinámicos con el aprendizaje, lo que les permitirá establecer conexiones y desarrollar modos interactivos de aprender. Se debe crear una cultura del aprendizaje que invite a arriesgar y a experimentar, es decir, a crear un compromiso emocional intelectual y social. Cualquiera que sea el resultado de una actuación extraordinaria, será por consecuencia de un aprendizaje extraordinario. No podemos limitarnos a ver y a enfatizar únicamente la acumulación de la información y la maestría del conocimiento, debemos modelar la esencia de la pregunta científica, entenderla y examinarla. Esto traerá como consecuencia que los niños tengan una nueva visión del aprendizaje, al tener mayor coherencia entre lo intelectual y los social, interactuarán con más libertad ante cualquier tipo de información. Para esto se debe demostrar la aplicación y la importancia entre una disciplina y otra y para lograrlo debemos alentar a que los niños sean lo más independientes y
lo más activos que se pueda adentro del aprendizaje. Autor: Ana Azuela |
El derecho a ser inteligente | Como podemos producir un aprendizaje excepcional