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 Seguimos viviendo momentos críticos derivados de la pandemia y en relación a cómo afecta, particularmente el aislamiento social en la parte emocional de nuestros niños, queremos compartirte este interesante artículo publicado por el sitio informativo así sucede. Las relaciones sociales que establecemos los seres humanos en las diferentes etapas de nuestra vida influyen de manera positiva en nuestro estado mental y emocional; ahora con el confinamiento a causa de la pandemia se pueden desencadenar varias complicaciones entre las que se incluyen los desórdenes emocionales, trastornos del sueño, síndromes depresivos, ansiedad, estrés, y agotamiento. Así lo afirmó el Doctor en Psicología Educativa, Miguel Ángel Urbina García, quien afirma que el aislamiento social tiene impacto en el bienestar emocional de los niños pequeños, ya que rompe con el desarrollo de relaciones duraderas y significativas con otros niños y con los adultos.
Señaló que las investigaciones sobre el aislamiento social muestran que durante el confinamiento actual, los niños podrían desarrollar sentimientos de tristeza o inseguridad, enojo, frustración, o aburrimiento. Además podrían desarrollar altos niveles de estrés como consecuencia de tener que enfrentar otro día de "peligro" debido a la pandemia, o signos tempranos de ansiedad derivada de una preocupación constante y pensamientos repetitivos para evitar contagiarse del virus, o incluso síntomas depresivos derivados de un estado de tristeza constante, mal humor o falta de motivación.
El especialista enfatizó sobre la importancia de tomar en cuenta el papel de otras variables que podrían influir en ese impacto, refiriéndose a la calidad de la interacción entre los niños y sus padres, la exposición a los medios de comunicación y el conocimiento que los niños tienen sobre la situación que se esta viviendo. Por ello recomendó observar los cambios en la conducta de los niños, así como mantener una actitud positiva para poder transmitirselas, ya que la salud mental de los padres puede tener una influencia directa en ellos, y en cierta medida mantener el contacto con familiares y amigos cercanos de manera virtual. Como nos hemos dado cuenta, el impacto que el aislamiento social tiene en la salud mental de nuestros niños puede ser muy serio, por ello debemos estar al pendiente de ellos y mantener un diálogo constante, el saber cómo se sienten y qué pensamientos tienen acerca de la situación da paso a un actuar oportuno que evite diversos trastornos psicológicos. También te puede interesar cómo hablar con los niños sobre el coronavirus. |
